El daño ocular producido por la radiación UV es acumulativo y permanente.
- El espectro de radiación solar dañino para el ojo humano es bastante ancho.
- Se divide en tres bandas, según su longitud de onda: UVA, UVB, UVC.
- Cuanto más corta es la longitud de onda, mayor es la energía y mayor el daño que puede causar.
La gafa de sol sigue siendo la mejor protección para los ojos, sin embargo, existen rayos periféricos que se cuelan por los laterales, afectando directamente al cristalino y a la zona periférica de la córnea, además, diversos estudios, como el realizado por la Kanazawa Medical University en Japón, demuestran que los UV más dañinos, en algunos meses como en septiembre se producen a horas insospechadas, por ejemplo a las 9 de la mañana, horas en las que muchos usuarios no tienen costumbre de utilizar sus gafas de sol.
Además este estudio informó de que, en un estudio a niños, ya se detectectaban daños en la conjuntiva, en forma de pinguécula visible en un 10% de los casos estudiados y tiñendo con flueresceína en un 32% de los niños estudiados mostraban daños, a simple vista “invisibles” pero presentes.
Por todo esto y teniendo en cuenta que cada vez es mayor el número de usuarios de lentes de contacto, incluso por présbitas (ya existen lentes de contacto progresivas), desde el Instituto Johnson Vision Care recomendamos la adaptación de lentes de contacto con filtro UV TOTAL, como son las de la gama OASYS, 1 DAY MOIST o ADVANCE PLUS.
A continuación, mostramos las imágenes obtenidas tras introducir un “tinte” en la cámara anterior del ojo que sólo “tiñe” con presencia de rayos UV, para ver la incidencia de estos rayos sin lente de contacto, con lente de contacto convencional o con las lentes Johnson.